Simulacro de evacuación: ¿Estamos preparados?

El pasado 2 de diciembre se llevó a cabo un simulacro de evacuación concertado con los Bomberos Voluntarios de Popayán, los miembros del Copaso y los brigadistas de emergencia de nuestra entidad.

A través de un simulacro de incendio y de sismo, todos se vieron en la tarea de evacuar las instalaciones de la entidad, con el fin de evaluar el comportamiento de los funcionarios y de los brigadistas quienes desde hace un año vienen siendo capacitados por los Bomberos.

Entre risas, pero también con mucha colaboración por parte de los funcionarios se enfrentaron algunos obstáculos que no se tenían previstos en el momento del simulacro, uno de ellos fue que la puerta de emergencia de la entidad no se pudo utilizar por estar en un área arrendada, como alternativa se habilitó la ventana de la Dirección Administrativa y Financiera.

Según la Secretaria General, Halma Vidal, el objetivo de un simulacro de evacuación es que las personas tengan unos mínimos conocimientos de cómo debe procederse en caso de que hubiera un siniestro, un fenómeno natural, un incendio, un sismo o un acto que genere pánico, además que las personas conozcan las salidas de evacuación.

Por eso, un hecho que marcó la jornada fue que los funcionarios tuvieran que salir por una ventana, incluso algunos estaban renuentes a hacerlo, pero no tuvieron otra opción. “Un punto a resaltar es que junto a la ventana que era la salida de emergencia se encontraba un archivador, lo cual obstaculizaba el paso, lastimosamente nadie tuvo la iniciativa de moverlo para que todos pudieran pasar” dijo la funcionaria.

Estos planes de evacuación están planteados en el subprograma de Seguridad Industrial, dentro del programa de Salud Ocupacional. Por eso se realizaron reuniones previas al simulacro entre los brigadistas de emergencia, los Bomberos y los miembros de Copaso.

Durante el simulacro se contó con el apoyo de la ARP Colmena, además de coordinadores que debían movilizar a la gente hacia el sitio de evacuación. Se representaron casos como el de un hombre herido que tuvo que ser evacuado en una camilla, otro por el segundo piso y un tercero que se encontraba en las gradas impidiendo el paso de las personas.

Finalmente, todos debían salir de la entidad y llegar a un punto seguro, en este caso se determinó que fuera en la Plazoleta de la Iglesia de San Francisco.

Resultados

Según la Secretaria General, los brigadistas trabajaron muy bien y realizaron una labor no sólo previa sino también posterior para tomar medidas correctivas. En el balance se analizó que sólo uno de los brigadistas se dedicó a apagar el incendio cuando deben ser dos para darse apoyo, también que se requiere otra camilla pues solamente hay una en la entidad y debe estar en un lugar de fácil acceso. De igual manera, se concluyó que el botiquín que se encuentra en la Secretaria General debe ser portátil.

Para el éxito del simulacro fue clave la colaboración de todos los funcionarios, “la gente vivió la experiencia y adquirió conocimiento para que el día en que pueda ocurrir una emergencia, las personas sepan que salidas de emergencia hay, que debe haber tranquilidad, orden y sobre todo apoyo entre las personas, seguir las instrucciones de los brigadistas, pues ellos están capacitados para brindar la atención necesaria” afirmó Halma Vidal.

El simulacro evidenció que la seguridad es básica en una entidad, por lo que es necesario que se integren más personas a la brigada, para que se puedan tomar decisiones y actuaciones rápidas que permitan preservar la vida de todos los funcionarios de la entidad.